La contaminación causa un 7% de muertes

Uno de los grandes problemas de un modelo de movilidad no sostenible es el exceso de contaminación. Este exceso, partiendo de los umbrales que recomienda la Organización Mundial de la Salud, causa al año 1.000 muertes en Barcelona, un 7% del total.

El estudio de la Agencia de Salud Pública de Barcelona también indica que la contaminación está relacionada con el incremento del 11% de casos de cáncer de pulmón. Un 33% en los casos de asma infantil.

El estudio sostiene que, durante el 2019, se superaron en la ciudad el nivel guía de la OMS y límite legal de la UE de óxidos de nitrógeno NO2 (un peligroso contaminante muy vinculado al tráfico), 40 microgramos por metro cúbico. También el de las partículas PM10 (20 microgramos por metro cúbico). Y partículas PM2,5 (10 microgramos).

El 35% de los barceloneses están expuestos al exceso de NO2

El gobierno municipal señala al tráfico como responsable principal de la situación e insta a menguar su presencia como principal medida a tomar par a reducir la mortalidad.

Por este motivo, los expertos coinciden en señalar la importancia de la movilidad sostenible y que la vía más idónea para afrontar el problema de la contaminación es reducir la presencia del vehículo privado en la ciudad. 

Investigadores de ISGlobal (Instituto de Salud Global), han indicado que Barcelona es la ciudad con la densidad más tránsito de Europa y una de las que acumula más en el mundo. 6.000 por kilómetro cuadrado. 

El episodio del confinamiento de la pasada primavera nos confirmó la vinculación entre tráfico y contaminación. También hay estudios que vinculan partículas de contaminación a un mayor índice de transmisión del virus de la COVID y una mayor afectación de la misma. En las ciudades con aire sucio, las personas que contraen el coronavirus tienen un riesgo de muerte de hasta un 11% superior a la media.

Además, dedicamos un 60% del espacio público al vehículo privado que, paradójicamente, la mayor parte del tiempo está parado.  La estrategia no solo pasa por hacer cambios en la movilidad, sino por destinar este espacio público para el bienestar de las personas que lo habitan.

Hemos comentado en alguna ocasión el derecho de los ciudadanos a la salud, entendido como el derecho a vivir en un entorno saludable. Este derecho está totalmente vinculado al derecho a una movilidad sostenible que promovemos desde Cycling Friendly Mobility

Promover los desplazamientos caminando y en bicicleta no solo ayudan a reducir los inconvenientes del tráfico motorizado. Contribuyen a un estilo de vida que mejora la condición física y mental.

¿Te apuntas a la movilidad Cycling Friendly?

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