Tipología de vías ciclables
¿Por dónde circulo con mi bicicleta? Es una de las preguntas que se suelen hacer los nuevos usuarios de este tipo de vehículo.
La evolución de los carriles bici y de las vías ciclables en las ciudades está contribuyendo a ampliar las alternativas para circular en bicicleta.
Se entiende por vía ciclista toda aquella vía específicamente acondicionada para el tráfico de ciclos, con la señalización horizontal y vertical correspondiente, y cuyo ancho permite el paso seguro de bicicletas.
Dentro de las vías ciclistas se pueden establecer diferentes. Aquí te distinguimos las principales en base las diferencias establecidas por la DGT.
Carril Bici
Aunque no requieren mucha presentación, se considera carril bici todo aquel carril específico que discurre adosado a la calzada, ya sea en un solo sentido o en doble sentido. El carril bici puede estar protegido por elementos laterales que lo separen tanto de la calzada como de la acera, si bien no es una condición sine qua non.
Acera Bici
Las aceras bici son vías ciclistas que se encuentran señalizadas sobre la acera. Son el tipo de vías ciclistas menos recomendado por el conflicto que puede generarse entre peatones y ciclistas, siendo en este caso el elemento más vulnerable el peatón.
Pista Bici
Las pistas bici son vías que se encuentran segregadas del tráfico motorizado y cuentan con un trazado totalmente independiente de las carreteras. A diferencia de la acera bici, el trazado de este tipo de vía ciclista no convive con el peatón.
Senda ciclable
Las sendas ciclables son vías especialmente pensadas para peatones y ciclos que se encuentran segregadas del tráfico motorizado. Son las que solemos encontrar cuando circulamos por espacios abiertos, parques, jardines o bosques, y para mejorar la seguridad del peatón podemos encontrarnos con separaciones señalizadas para ciclistas.
Ciclocarril o ciclocalle
Los ciclocarriles son vías integradas en la calzada donde los vehículos no pueden superar la velocidad señalizada. Son carriles con coexistencia entre bicis y vehículos, y pueden ser de calles de uno o varios carriles.
Así mismo, es importante reseñar que, a excepción de autopistas, algunas autovías y las aceras, se puede circular por cualquier vía pública en bicicleta. La nueva normativa de la DGT encaminada a pacificar el tráfico urbano de las ciudades, reduciendo la velocidad máxima en muchas calles a 30 km/h, tiene entre otros objetivos fomentar la ciclabilidad así como la circulación mediante vehículos de movilidad personal en la vía pública, sin necesidad de tener que hacer uso de carriles bici o hacer grandes modificaciones en la infraestructura urbana.